Una temporada más, y van nueve en los últimos diez años, el Alcalá comienza la liga empatando su partido. En esta ocasión, el rival fue el Rayo B de Jose Manuel Jimeno, que más que en la primera jornada de liga, parecía que estaba en la 39 de la pasada, pues el filial franjirrojo fue un calco al de la campaña pasada.
Fue el clásico primer partido de la temporada, en el que ambos equipos apenas lograron hilvanar grandes jugadas trenzadas, debido a que acaba de finalizar la pretemporada, y las piernas todavía pesan.
Además, Rayo B y Alcalá, dieron a parar con un pésimo colegiado, que temporada tras temporada, da que hablar por sus discutidas acciones, y su excesivo número de tarjetas. En un partido casi de guante blanco, en el que solo el juego brusco apareció al final del partido, debido entre otras cosas al cansancio, el colegiado canario mostró once cartulinas amarillas (dos de ellas para Cerrudo y Cuervas) y una roja directa al visitante Plata.
El primer expulsado fue el interior diestro rojillo Cerrudo, que en cinco minutos vio dos tarjetas, la primera en una falta rigurosa, y la segunda por mano. Diez minutos después, fue un alcalaíno en las filas rayistas, Cuerva, el expulsado, también de forma rigurosa, y quizá por compensar.
Fue lo más destacable del partido en el primer tiempo, puesto que ambos equipos apenas pisaron el área contraria, donde solo se contabilizó un acercamiento peligroso por equipo, en una falta directa de Javi Vicente para el Alcalá, y un remate desde fuera del área de Nono para los vallecanos, que detuvo sin problemas Juancho.
En el segundo tiempo, el equipo de Jimeno estiró líneas, y se adueño del esférico, ante un Alcalá que buscaba una contra que no llegó, mientras el Rayo B, a cuenta gotas, iba teniendo oportunidades.
La primera de ellas fue a los doce de la reanudación, en una internada por banda diestra de Rayco, que se plantó solo ante Juancho, que evitó el tanto en una parada más típica del balonmano. Cinco minutos después, la ocasión fue para la Deportiva, en botas de Toni Miguel, que botó una falta desde la imaginaria línea de ¾ que se fue rozando la escuadra diestra de Ismael, cuando los visitantes ya estaban con nueve, por la expulsión por roja directa del delantero plata, por dar un pequeño golpe a un contrario, que estaba tendido en el suelo, tras entrar al delantero granadino.
Fue entonces, cuando Paco Flores dio por bueno el empate, y planto línea de cinco atrás (retrasando a la defensa a Javi Vicente) con otros tres por delante, atrincherado en su campo, sin apenas posesión del balón, ante un Rayo B, que al ver que su rival no podía pasar del centro del campo, adelantó líneas.
El equipo vallecano, tenía más presencia en campo contrario que en el propio, pero apenas pudo inquietar a Juancho, hasta que a falta de siete minutos para el final, el canario Rayco puso por delante a los suyos, tras rematar según le vino, solo libre de marca, delante de Juancho, una falta lateral.
Se jugó el todo por el todo el técnico visitante, dando entrada a Miguel Ramos por el capitán Joselu. El Alcalá, definitivamente se vino arriba, adelantó muchos metros, abusando quizá del juego en largo, descuidando una defensa, que vio como en el minuto 91, Juancho volvía a salvar a los suyos, en una jugada idéntica a la del minuto 57 protagonizada por Rayco, aunque en esta ocasión su autor fue el recién ingresado en el terreno de juego, Roberto.
Y cuando ya todo el mundo daba por hecha la victoria de los locales, la suerte se alineó con los rojillos (vestidos de morado). Javi Vicente botó una falta directa sobre la portería de Ismael, que intentó atrapar el esférico, pero este le hizo un extraño, parte en culpa por su mal diseño, parte en culpa por el viento, llegó a tocar con la yema de los dedos, el balón tocó en el palo, salió desviado hacia el otro, y por el camino apareció Miguel Ramos, para empujarla como pudo, pues el balón se le vino muy encima, para igualar la contienda, en el último minuto de la prolongación, con lo que se llegó al final del partido.
Al final, reparto de puntos, que sabe a gloria a los complutenses, debido a la forma de llegar, y a los condicionantes del partido, y que sabe muy agrio a los de Jimeno, que ya se daban por vencedores, en esta primera jornada, en la que el equipo complutense no pierde desde hace catorce años.
Fuente : Isma Corregidor (EGM)
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